domingo, 3 de junio de 2007

3 DE JUNIO

Más o menos a esta hora, hace cinco años, entraba yo en el hospital con contracciones cada tres minutos, sin tenerme en pie, pero como buena cabezota que soy me negué a sentarme en una silla de ruedas. Si alguna de las personas que lee esto ha dado a luz alguna vez, entenderá mis motivos. Las contracciones de parto son el dolor más fuerte que yo he sentido nunca, pero sentada, sentada son realmente insoportables.

En menos de una hora me llevaban al paritorio, si no se dan prisa lo tengo por el camino. Me dice la matrona, no hagas fuerza por favor!!!

Al llegar allí se sienta y después de analizar la situación durante unos dos o tres segundos, (no había tiempo de más), me dice, tres contracciones y fuera.

La primera contracción estuvo bien, la cosa iba de lujo, pero a la segunda me dice, para, para, para!!! Y yo OOOOOHHH, que sucede? La muy… no sé como llamarla, me dice, es que te he dicho a la tercera, no querrás tenerlo a la segunda y así fue, a la tercera fuera.

Yo me partía de risa, mi marido alucinado porque según el quedaba feo eso de parir entre risas, la matrona otro tanto de lo mismo, pero que se le va a hacer, después de que mi primer parto durase la friolera de diecisiete horas, parir tan rápido me daba risa, eso ni era parto ni era nada.

Pues como os he dicho, esa criatura ha cumplido hoy cinco años, menudo sinvergüenza está hecho, las va a traer locas, bueno, puede que sea amor de madre, pero tanto si es así como si no, que bonitos son los días como hoy.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que preparando su cumpleaños tenías casi más ilusión que él,estabas muy graciosa toda nerviosilla.Te he visto con los dos y te adoran. Supongo que tenerlos es una experiencia maravillosa. Yo confirmo que éste es tremendo y que sabe ser zalamero y ganarse a la gente. En fin, ¡ambos son una delicia de niños!.
Un beso enorme
Tempodelecer

dsdmona dijo...

Felicidades mamá... supongo que el dolor se ve de sobra compensado cuando lo tienes en los brazos... PD: Gustos parecidos en libros, mmm, me gusta

Anónimo dijo...

LO DURO NO FUE ESO!
lo duro fue estar en casa con el nuevo bebé y tener a tu otro hijo en el hospital, ¿te acuerdas?
Yo si, estabas muy feliz pero a la vez muy apagada!

SIS dijo...

¿Como no me voy a acordar? Creo que no lo he pasado peor en toda mi vida. Yo siempre digo al recordarlo que si es angustioso tener a un hijo en el hospital, que encima no puedas estar con él es insoportable.