SÓLO UN PENSAMIENTO

Cierro los ojos, el silencio me embarga, es extraño, no suele reinar el silencio en mi casa, señal inequívoca de que los niños se han dormido, o están en el colegio o en cualquier otra parte.

Esto me recuerda cuando era pequeña, una frase que me dijo mi padre una vez.

Durante aproximadamente quince años, en mi infancia y juventud, yo iba en verano a pasar unos días a casa de una tía mía, al pueblo de mi abuela y en uno de estos viajes, al regresar me dice: Cuando estás aquí no me dejas atender a nada, ni oír la tele, pero que vacía está la casa sin ti.

Es curioso porque es uno de esos recuerdos bonitos que tengo de mi padre, de los que sólo se conservan unos pocos.

Una de mis frases favoritas, la cual podéis leer aquí en mi blog permanentemente, es “no es más grande el que más sitio ocupa, si no el que más vacío deja cuando no está”. Me parece tan grandiosa…

Me peleo con ellos, les grito, (Soy un poco histérica.) me enfado… Pero no quiero ni pensar cómo sería el vacío que dejarían.

HUEVOS

No os riais mucho de mí, pero tengo una duda existencial,
a ver si alguien me la puede resolver.




Estaba hoy friendo un huevo y me preguntaba:
¿Por qué la clara cuaja tan rápidamente mientras que
la yema tarda muchísimo más?
Ya sea en esas circunstancias, o cocido, pasado por agua...

Es una tontería, pero me he pasado un buen rato
dándole vueltas sin encontrar una explicación,
espero que alguien me pueda ayudar.

BABEANDO

Creo que hacía muchísimo tiempo que no me lo pasaba tan bien en la playa. Con una de éstas…




hemos estado jugando mis hijos y yo esta tarde. El mar estaba un poco revuelto, mientras ellos permanecían sentados en el interior, yo me encargaba de empujarles para exagerar el efecto del oleaje al chocar. Menudas risas soltaban cada vez y yo mirándoles como atontada.

En días como hoy doy gracias por lo afortunada que me siento de ser madre.

LA LLAMADA DE LA SANGRE

Hoy le estaba dando vueltas a una cosita y entonces he pensado en escribir algo sobre el tema. La frase que me ha hecho empezar ha sido “La llamada de la sangre”. Yo no creo en esa tontería, lo siento, pero me suena a cuento chino.

Según esta frase y las personas que la defienden, cuando alguien lleva sangre tuya, aún sin saberlo, te une a él un lazo especial que siendo invisible e inexplicable se siente. Jajajajajaja, ¡¡¡menuda chorrada!!!

Puedo poner algún ejemplo con el fin de convencer a cualquiera que sea capaz de discutírmelo. A ver, según esto si mi padre tuvo algún escarceo por ahí con sus consecuencias, ¿yo debería de sentir algo cuando me cruce con esa persona? Al fin y al cabo sería mi herman@, digo yo. Si fuera así, se le había acabado el trabajo a esos programas que en ocasiones buscan hermanos que fueron dados en adopción, jajajajaja.

¿O con esto me están diciendo que a un hijo adoptado no le vas a querer lo suficiente porque no es de tu sangre? Lo dudo mucho, porque en este caso yo siempre he opinado que hay muchos hijos biológicos no deseados y por el contrario estos que cuesta tanto “conseguir”, suelen ser muy deseados.

Y la mejor de todas, vamos a poner por caso que damos a luz y por un error nos cambian a nuestro hijo en el hospital. ¿Instantáneamente cuando lo pongan en mis brazos voy a sentir que ese no es mi hijo? ¡¡Venga ya!!

Vamos a hacerlo más rebuscado, los donantes de sangre cuando van por la calle, ¿deben de sentir algo por todas las personas que han recibido su sangre? Porque tela marinera.

Bueno, cuantas tonterías se pueden llegar a decir en unas líneas, ¿pero verdad que tengo razón? ¿y que esa frase es una auténtica estupidez?

COMER

Una de mis grandes pasiones es la cocina, me paso sin ningún tipo de problema horas si es necesario dedicada a preparar cualquier plato. Dicen que lo hago bien, yo creo que sólo es cuestión de práctica y de ponerle ganas.

La práctica desde luego no me falta, tener que cocinar todos los días para los míos durante años, ha sido un buen entrenamiento, pero la recompensa es enorme, ver con que deleite comen… a mí me merece la pena.

Según he oído, si se cocina con amor todo sale más rico, entonces no hay problema, no hay quien lo dude, espero, yo cocino con todo el amor del mundo. Como suelo decir, disfruto más cocinando, que comiendo y no os creáis, me encanta comer, pero…

Ahora que lo pienso, que curioso, a mí lo que más me gusta comer en este mundo no necesita preparación. Fruta, mi debilidad, mis queridas naranjas, un albaricoque, un melocotón, una ciruela madurita, un kaki… ¡¡Ohhh!! ¡Que delicia!

Me parece increíble que mi paladar halla decidido inclinarse por éstas, ¿no os parece?