domingo, 27 de julio de 2008

LA VIEJA SIRENA



 Ambientada en el siglo III d. C., nos cuenta las aventuras y desventuras de una misteriosa mujer, inexplicablemente cautivadora, capaz de vivir un amor tan intenso que rebasa cualquier realidad.

En parte fantástica, mitológica, aunque deliciosamente escrita, envuelta en las tramas de la época, cuando el imperio romano y el persa dominaban el mundo, ya cercanos a su decadencia, con el crecimiento de nuevas culturas, la aparición de diversas creencias religiosas y el que fue, seguramente, el principio del cristianismo. 

Creo que está muy bien documentada y que resulta, para los que como yo se apasionan con la novela histórica, tremendamente apetecible. 

Está llena de párrafos dignos de mención, pero yo os dejo dos que, aunque posiblemente no reflejen el espíritu de la historia, a mí me han gustado mucho, por su significado, por lo que nos dicen de manera sutil, o en ocasiones no tanto y por lo deliciosamente escritos que están.

"- Conozco a un Krito tierno, dolorido, y tan, tan sensible… En la mar hay un cangrejo incapaz de fabricarse un caparazón y camina en carne viva, desnudo, vulnerable, a la merced de un roce, de un arañazo en el coral… Se protege buscando una concha vacía que no es la suya y se refugia metiéndose dentro.

- En suma, un monstruo, un engendro inútil para la vida.

- Si fuese inútil no estaría vivo… ¿Monstruo? Nada de lo que es puede ser monstruoso: desde el momento en que la naturaleza lo ha creado es natural. La vida no produce monstruos; los producimos nosotros."



"Cuando la sirena, contorneando otra vez el promontorio, llegó hasta la caleta, el joven y la mujer se encontraban ya en la playa, ambos desnudos, contemplándose, el cuerpo joven del muchacho frente a las curvas opulentas pero aún firmes de la hembra. Ésta avanzó hacia el joven, puso las manos en sus hombros, las deslizó con sabiduría por el cuerpo adolescente… Poco después ambos se entrelazaban tendidos en la arena, en algo que la sirena se preguntó si era combate o juego y que acabó convirtiéndose en una agitación agónica, entrecortada de gemidos y jadeos. Si era lucha ninguno resultó vencedor, puesto que terminaron tendidos uno junto a otro, transmutados sus rostros en máscaras gozosas. Al cabo ella se incorporó sobre el codo y acarició los cortos cabellos del joven, dirigiéndole una inefable mirada, entre voluptuosa y maternal."




Esta es la cubierta de una edición italiana que descubrí buscando la que yo conozco y me ha gustado tanto, que he decidido poner las dos.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuando lo leí, me había gustado mucho, recuerdo que lo cogí y no paré hasta que lo terminé, además de que lo asocio con buenos y bonitos recuerdos, un besiño
Tempodelecer

NiñoCactus dijo...

Me gustó mucho este libro... Justo estaba buscando la conversación con Krito y la encontré en su blog. Interesante su lista de recomendaciones, tomaré nota (aunque reconozco que a mí El niño del pijama de rayas me pareció horrible).
Un abrazo