Últimamente, cada vez que me sucede algo extraordinario, siento la imperiosa necesidad de coger papel y lápiz para plasmarlo, como tratando de aclarar mis pensamientos con palabras escritas, pero lo que me ha ocurrido hoy es tan difícil de explicar…
Hoy ha sido un día de esos que borraría del calendario, ahora mismo daría cualquier cosa por poseer la máquina del tiempo y echar marcha atrás.
Estoy sentada en la playa, a apenas un metro del agua y siento deseos de meterme en ese mar helado, aunque sería inútil, mi decaimiento no desaparecería tan fácilmente. Quizás si nadase lejos, muy lejos, hasta agotar mis fuerzas… pero no. Hace frío, una ligera brisa marina se cuela por entre mi ropa y me dice que es de locos, pillaría una pulmonía.
¡Joder! Acaba de pasar un tío junto a mí haciendo footing y me ha salpicado. Efectivamente está fría.
Al levantar la vista y fijarla en el horizonte he visto a un pez saltar. Me ha arrancado una sonrisa, la primera en varias horas. No le des más vueltas niña, siempre hay una razón para seguir adelante.
PD: Esto lo escribí ayer a las 20:30, como digo, sentada frente al mar y aunque no se me ha pasado completamente, estoy algo mejor.
2 comentarios:
Al entrar me asusté, ahora lo único que te digo es que poquiño a poquiño te vayas tranquilizando y que te quedes con lo importante, de lo demás a pasar, no es un problema tuyo, es de otra persona, así que sea esa persona quién lo resuelva. Un beso enorme y cuídate
Tempodelecer
Auque no sé qué es lo que pasa, el mar, tú y tus pensamientos, todo es un universo, tú universo y sólo tu puedes cambiarlo. Sonríe, todo estará mejor mañana. Mañana siempre es un buen día.
Besos.
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