
(Como no he encontrado una carátula del libro mínimamente aceptable, hoy una foto de la autora.)
Cuando empecé este libro alguien me dijo: Ya verás, es totalmente diferente a lo que has leído de ella hasta ahora (Lo que yo había leído era posterior).
Sin duda esa persona, a quien denomino mi asesora literaria, sabía lo que decía, toda una sorpresa esta novela, que cómo me temía, me ha dejado con ganas de leer las otras dos que completan la trilogía.
La historia está llena de frases, párrafos enteros que he releído con calma hasta saciarme y como ejemplo pondré uno que me gustó especialmente:
“Que no se puede decir a nadie ama si no estás dispuesto a ser amor, que no se puede decir a nadie anda si no te haces camino, que no se puede decir a nadie bebe o come si no estás dispuesta a transmutarte en pan y en agua…”